Vivo en el quinto piso, casa sin ascensor. En el apartamento, ya que es habitual hablar, va "renovación". Naturalmente, todo "viejo e innecesario", en el relleno sanitario. El turno del baño es de 200 litros, Castunin. ¿Cuántas enferencias no lo saben, pero pesado ah?
Apretar la mitad en la escalera, siete sudores demandados. Totalmente imposible: los apartamentos vecinos que estaban comprando. Además, sin ayudantes, bueno, de ninguna manera. Se sentó a fumar. Y los cigarrillos de TJU ... terminó. De acuerdo, voy a la tienda, al mismo tiempo, llamando a alguien en cerveza con un lanzamiento del baño. Bajar al patio. Hay dos personalidades, fontaficas. Sólo desde el calvo, digo:
- Chicos, ¿no necesitas un baño? Tengo una reparación. Necesito sacar la quinta ...
- ¿Y cuánto?
Pretendo cuánto costarán los asistentes a los amigos, divido por la mitad ...
- "Dos 0.5!
Veo la obra de pensamiento en fisonomías amistosas.
- ¡Estar de acuerdo! ¿Dónde está el hierro fundido?
- En esta entrada, en el quinto piso. Allí, madre en casa, di eso de mí. Yo, mientras estoy en la tienda a la deriva.
Voy a la tienda, compré cigarrillos y prometí 2 a 0.5. Regresando a casa, no hay entrada de baño. Aparentemente, sin pago, ¡no hay trabajo! Lógico.
Levantar a casa ... ¡No hay baño en el baño! ... No entiendo nada, abro la puerta. La madre viene a reunirse.
- ¿Y dónde? ... bañera ...
- Dos algunos campesinos vinieron. Dijeron que estuvimos de acuerdo con usted sobre el baño. Dio dinero. Dijeron que usted se compró. Y la tomó con ellos ...
Solo pila en la pared en el suelo ...
Por cierto, el dinero era exactamente de 2 a 0,5. ¡Gracias chicos!
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